jueves, 7 de junio de 2012

Capitulo 15; Al borde de la locura.


Todos empezamos a gritar de alegría, abrazarnos y saltar por las camas. Luna cogió el teléfono y puso el altavoz para que todos pudiéramos escucharlo:
-Luna: Liam cariño! Dónde estás?! Estás bien?! Estábamos muy preocupados por ti!
-¿?: No soy Liam pero si que estoy con él, tu… debes de ser Luna no?
-Luna: Sí, soy Luna y tú quien eres? Dónde está Liam?!
-¿?: A ti eso no te importa. Bueno pues nada que Liam está bien pero me ha dicho que os llame para decíroslo…
-Luna: Qué estás haciendo con Liam?! Suéltalo ya guarra!
-¿?: Mira bonita, tengo a tu novio y, como me insultes el que va a sufrir es él así que, contrólate vale?
-Niall: Que sepas que como no sueltes a Liam, te vas a pegar el resto de tu vida en una cárcel!
-¿?: Jajajaja. No pienso soltarle nunca pero, si no nos molestáis más, no le aré ningún daño…
Justo después de eso, oímos un grito, de dolor y la llamada terminó. Zayn salió corriendo al pasillo, a buscar a un policía que vigilaba nuestra habitación las 24 horas del día.
Muchas personas entraron corriendo a nuestra habitación. Nos dijeron que le contáramos todo lo que nos había dicho, y se llevaron el teléfono de Luna.
Ahora estábamos más preocupados aún sabiendo que a Liam podían hacerle daño. Después de la llamada, tuvieron que volver a dormir a Luna ya que sufrió otro ataque de nervios.
*Narra Liam*
Ya llevaba dos días secuestrado. Me costó mucho convencer a Elsa para que llamara a Luna pero al final lo conseguí. No se si eso les tranquilizó un poco o fue al revés pero por lo menos, sabían que seguía vivo.
Después de tanto esfuerzo para liberarme de las cadenas, mis muñecas empezaron a sangrar y a formarse heridas por fuerza con la que estaba atado. En esos dos días no había bebido ni comido nada.
Elsa, se pasaba todo el día sentada a mi lado, mirándome, sin decir nada. Cuando por fin me trajo algo de comer, fue tan solo fue un trozo de pan y un baso de agua. Al tercer día, conseguí atreverme a preguntar qué quería de mí.
-Elsa: Yo solo quiero que seas mi novio, nada más –contestó-
Ya estaba desesperado y haría cualquier cosa por salir de aquí y volver al hotel. Pasaron otros dos días. Tuve que fingir estar enamorado de Elsa, para poder salir de ahí.
Tenía que besarla a todas horas, besos que no significaban nada, con los que no sentía un cosquilleo por todo el cuerpo, besos que no me hacían volar en las nubes. Los labios dulces, húmedos y carnosos de Luna, habían sido sustituidos por los de mi secuestradora.
*Narro yo*
Pasó una semana larga o más bien, interminable. Cada día que acababa la esperanza de encontrar a Liam iba disminuyendo. Ni una pista, otra llamada, ni siquiera un sospechoso. Noches oscuras, llenas de pesadillas. No dormíamos y apenas comíamos. Pasábamos todo el día buscando a Liam, sin decir una palabra. Una visita tras otra, policías, familiares, amigos, algunos fans, nos visitaban todo el día, a todas horas. Cuando estábamos cansados de soportar todo esto, fingíamos sufrir un ataque de ansiedad para así obligar a los médicos a darnos a analgésico para dormir todo el día.
Una de esas largas noches, las pesadillas habituales de cómo torturaban a Liam desaparecieron. No se si fue por culpa de los calmantes, o simplemente de mi subconsciente pero esa noche soñé algo bastante real. Toda la escena, de la primera noche que pasamos en California, cuando la televisión emitió un fuerte pitido y Niall dejó de besarme para escucharla atento. Recordé perfectamente las palabras del presentador, incluso el nombre y la foto de la chica, a lo que no había prestado mucha atención. Elsa, Elsa Pachús. Morena y alta, con graves problemas mentales. Me desperté de un salto y fui corriendo a por mi ordenador. Niall, al que desperté por la fuerte sacudida del colchón por mi salto, se acercó a mí. Le conté lo que había soñado y nos pusimos a buscar información sobre ella.
Esto es lo que apareció:
Elsa Pachús, 17 años. Interna en el manicomio`` Langley Porte´´ en San Francisco, habitación 122. Fuertes problemas de autocontrol y graves problemas mentales. Bastante peligrosa ya que atacó a dos de sus médicos. Medicación fuerte.
Tres intentos de huida y uno conseguido.
….
Todo eran datos que no nos servirían, que no nos llamaban la atención hasta que leímos esto:
Extraña obsesión con personas famosas.
Miré a Niall al igual que lo hizo él a mí y volvimos a mirar la pantalla de nuevo:
Tiene un peluche al que llama Liam.
-Luna: Qué estáis haciendo a estas horas? –Niall cerró de golpe la pantalla del ordenador-
-Yo: Pues veras, e soñado una cosa que tal vez…
-Niall: -interrumpiéndome- A soñado que me habían secuestrado y, se ha levantado gritando, la estaba intentando calmar
-Yo: -extrañada por la interrupción de Niall- Sí, exactamente…
-Luna: Ah vale, será mejor que os valláis a dormir ya, si no mañana tendréis mucho sueño, es tarde
Nos metimos a la cama, fingiendo que estábamos dormidos hasta que Luna dejó de estar despierta.
-Yo: Niall,-le dije al oído por si alguien nos escuchaba- por qué no me as dejado contarle la verdad a Luna?
-Niall: Luna está muy mal por todo esto, crees que decirle que puede que una psicópata que ha atacado a tres médicos ha secuestrado a su novio la ayudaría?
-Yo: Tienes razón pero, tarde o pronto acabará enterándose
-Niall: Losé pero, de momento solo lo vamos a saber tú, yo y los policías para no preocupar más a los demás vale?
-Yo: Vale
-Niall: Venga, duérmete es muy tarde
-Yo: No quiero dormir, es horrible. No quiero tener más pesadillas de cómo torturan a Liam
-Niall: Pero tienes que dormir. Vamos ha hacer un trato, cada vez que tengas una pesadilla, despiértame así no estarás nunca sola
-Yo: Pero no quiero molestarte mientras duermes
-Niall: No me vas a molestar, yo también tengo pesadillas y nunca puedo dormir
-Yo: Vale, yo duermo si tú prometes no dejar de abrazarme nunca –estaba con la cabeza en su pecho y su brazo por debajo de la espalda apretándome fuerte contra él-
-Niall: Prometido–dijo abrazándome aún más fuerte- Prométeme tú también que siempre estarás a mi lado
-Yo: Prometido
-Niall: Te quiero –dijo besándome-
-Yo: Yo también te quiero –dije devolviéndole el beso-
Me quedé dormida enseguida y, afortunadamente, no tuve ninguna pesadilla esa noche.
Por la mañana fuimos corriendo a decírselo a los policías. Al principio nos tomaron como unos completos locos pero, conforme les contábamos lo que habíamos leído y, que Liam había sido secuestrado un día después de su fuga, empezaban a creernos. El dato no servía de mucho ya que, Elsa también estaba desaparecida sin pista alguna.
*Narra Liam*
Las heridas de mis muñecas empezaban a infectarse y, cada vez me dolía más. Comencé a perder peso y a sentirme muy débil por la poca comida que Elsa me daba. Pasaron dos días más, las horas y minutos se me hacían interminables. Cada vez que Elsa se iba de la habitación o de casa, empezaba a gritar pidiendo ayuda o a intentar coger mi móvil pero, las cadenas me lo impedían y nadie parecía escucharme.
Pensaba a todas horas como podía escapar pero todas las ideas eran imposibles o demasiado surrealistas. De repente, me acordé lo que dijo Elsa ``Si quieres salir de aquí con vida, harás todo lo que yo te diga´´ así, que no me quedaba más remedio que hacer todo lo que ella dijera, ser su novio. Si lo hiciera, puede que me ganara su confianza y consiguiera desatarme de estas cadenas para así escapar pero si saliera mal, también podría quedarme aquí durante mucho tiempo.
Sin otro remedio, empecé actuar como un enamorado. Intentaba que los besos fueran más apasionados, cosa que no conseguía hacer, sin embargo los halagos resultaban más creíbles.
Ya llevaba 11 días secuestrado y cada vez perdía más la esperanza de poder salir de aquí y las ganas de luchar. Llevaba tantos días encerrado en esa habitación, con apenas luz y sin poder levantarme que las paredes cada vez se me hacían más pequeñas. Desesperado, cansado, débil, hambriento, sucio… No se muy bien como me sentía en esos momentos pero fuera como fuere era todo lo contrario a la felicidad que sentía cuando estaba con Luna. Después de tantos días, empecé a perder la cabeza, ya no distinguía lo real de lo imaginario, la verdad de la mentira.
Poco a poco me fui ganando la confianza de Elsa. Cada día conseguía aflojar un poco más las cadenas.
Ya tenía un brazo desatado, solo me quedaba el otro y los tobillos. Cuando Elsa venía, volvía a poner la muñeca dentro de las cadenas para que pensara que seguía atado.
Tenía ya las dos muñecas libres cuando alguien se acercó a mí y sentí como el filo de un cuchillo me presionaba el cuello.
No me dio tiempo a reaccionar y, la sangre empezó a salir por el profundo corte. Intenté llevarme la mano a la herida pero alguien me agarraba y lo impedía. No sabía que había pasado hasta que vi a Elsa con un cuchillo. Me besó llorando, me dijo al oído ``Lo siento´´ y salió corriendo de la habitación. No podía hacer nada, por más que intentaba cortar la sangre presionando la herida, no dejaba de salir. Empezó a empapar toda mi camiseta y comencé a marearme y a sentirme muy débil. Solo podía hacer una cosa, esperar hasta morir desangrado.
__________________________________________________
Bueeno, se que es un poco corto peeeeroooo.... Avisaroos de que la proxima vez que suba capitulos no sera uno no no nonon SERAN 3! Asi quee esperoo que os halla gustado!
Quereia agradeceros a TODAS y cada una de vosotras por leer mi novela, porque significa mucho para mi, sin vosotras no habria seguido escribiendo. Tambien quiero agradecer a muchas de vosotras por haberme ayudado a escribir y darme ideas y, si alguma quiere darme otra idea ya sabes privado o chat si?:D
Bueno pues eso, que os quiero muchisimo!

4 comentarios: